La canción que ha estado todo el día sonando en mi cabeza es, ¿adivináis? Echo de menos, la rumbita de Kiko Veneno. La culpa ha sido de Rosa, Diseñadora, de la típica gente que está con cascos, a lo suyo, y que a veces tararea más alto de lo que debería. Algún día hablaré de ella, de su peculiar sentido del humor y de su afinidad por las Pussy Riot.
La canción de 1992 pertenece al disco Échate un cantecito, que habré oído 1.000 veces, sobre todo esta canción, de mis favoritas de Kiko Veneno y «En un Mercedes Blanco». Ambas fueron elegidas por la revista Rolling Stones entre las 200 mejores de la historia de la música española (34 y 58 respectivamente).
Es curioso porque unos años antes de ese disco odiaba este cantante, no lo podía ver desde su época de La Bola de Cristal. Pero un día hizo algo chas! en mi cabeza y me empezó a gustar y después a encantarme oírlo.
Recuerdo un concierto suyo en la Plaza del Ayuntamiento de Logroño donde me lo pasé de lujo.
Y respecto a la letra de la canción qué decir. El comienzo es magistral. Habla de esos pequeños detalles de una relación que en el día a día se te van, pero que cuando los echas de menos se hacen grandes. De la nostalgia de lo perdido, de que cualquier tiempo pasado fue mejor. De lo humano, de lo mundano y del amor que hace girar el mundo. De como hay que cuidar lo que queremos, aunque no nos demos cuenta de lo mucho que lo queremos hasta que lo perdemos. Un clásico, pero contado y cantado con la excelencia de este gran autor.
Actuación Kiko Veneno Echo de menos en la hora musa
Letra de Echo de menos de Kiko Veneno
Echo de menos
La cama revuelta
Ese zumo de naranja
Y las revistas abiertas
Y en el espejo
Ya no encuentro tu mirada
No hay besos en la ducha
Ni pelos, ni nada
Y entre nosotros
Un muro de metacrilato
No nos deja olernos
Ni manosearnos
Y por las noches
Todo es cambio de postura
Y encuentro telarañas
Por las costuras
Lo mismo te echo de menos, lo mismo
Que antes te echaba de más
Si tú no te das cuenta de lo que vale
El mundo es una tontería
Si vas dejando que se escape lo que más querías
Si tú no te das cuenta de lo que vale
El mundo es una tontería
Si vas dejando que se escape lo que más querías
Echo de menos
El crujir de tus tostadas
Sentir por el pasillo
Tu gato que araña
En mi camisa
Llevo tu aroma preso
Y el rojo de tus labios
Por el cuello
Y entre nosotros
Un muro de metacrilato
No nos deja olernos
Ni manosearnos
Y por las noches
Todo es cambio de postura
Y encuentro telarañas
Por las costuras
Lo mismo te echo de menos, lo mismo
Que antes te echaba de más
Si tú no te das cuenta de lo que vale
El mundo es una tontería
Si vas dejando que se escape lo que más querías
Si tú no te das cuenta de lo que vale
El mundo es una tontería
Si vas dejando que se escape lo que más querías
Porque si tú no te das cuenta de lo que vale
El mundo es una tontería
Si vas dejando que se escape lo que más querías
Si tú no te das cuenta de lo que vale
El mundo es una tontería
Si vas dejando que se escape lo que más querías
Si tú no te das cuenta de lo que vale
El mundo es una tontería
Si vas dejando que se escape lo que más querías
Llora, Kiko, tienes que llorar
Hasta llenar la cantimplora
Con aquella lagrimita por lo que más quería
Si tú no te das cuenta de lo que vale
El mundo es una tontería
Si vas dejando que se escape lo que más querías
Si tú no te das cuenta de lo que vale
El mundo es una tontería
Si vas dejando que se escape lo que más querías
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